Los ‘Marine Leadership Traits’ en la figura de Nayib Bukele

AITOR TRESSERRAS

El Cuerpo de Marines de los Estados Unidos es, quizá, la rama de las Fuerzas Armadas americanas más distinguida y respetada en la sociedad occidental. Una percepción generada como consecuencia de la mediatización de sus múltiples logros en conflictos tan diversos como la guerra de Vietnam o el rescate del capitán Richard Phillips, secuestrado por piratas somalíes. Cualquier fuerza militar, y una con tal reputación aún más, debe escoger muy cuidadosamente a sus líderes para disminuir el riesgo al fracaso. A colación, los Marines formularon 14 rasgos esenciales del liderazgo: Justicia, Juicio, Fiabilidad, Iniciativa, Firmeza, Tacto, Integridad, Entusiasmo, Comportamiento, Altruismo, Coraje, Conocimiento, Lealtad y Resiliencia.

Dichos rasgos se pueden aplicar, asimismo, al ámbito político y gubernamental. Los mandatarios requieren ciertas habilidades para generar estabilidad y compromiso entorno a sus proyectos y, en último fin, alcanzar el éxito. Obviamente, algunos carecen de la mayoría de estas cualidades. Tal vez por eso su paso por el poder sea efímero e irrelevante. No obstante, hay otros en los que sí afloran muchos de los 14 Marine Leadership Traits. La figura de Nayib Bukele, presidente de El Salvador, es un buen ejemplo de ello. En los párrafos que siguen, sin entrar a realizar juicios de valor acerca de sus políticas, se van a confrontar cada uno de los 14 atributos con su modo de actuar y de comunicar.

Este 2022, Nayib Bukele ha iniciado una férrea campaña de detenciones contra las pandillas salvadoreñas. Su desarrollo es narrado a diario a través de las redes sociales del dirigente. En dichas publicaciones, se manifiesta su liderazgo.

Justicia (Justice): los impuestos de los ciudadanos honrados no deben emplearse para salvaguardar a los criminales (https://bit.ly/3KRGcsU).

Juicio (Judgment): demanda protección para la población decente y duros castigos para los asesinos, ladrones, traficantes… Solicita ese mismo juicio a organismos internacionales (https://bit.ly/3w6PYSY).

Fiabilidad (Dependability): la confianza de la sociedad salvadoreña en su presidente es palpable. Las redes sociales están repletas de publicaciones de agradecimiento y de soporte a las medidas implementadas por Bukele (https://bit.ly/3yrwNWq).

Iniciativa (Initiative): El Salvador es, desde hace largo tiempo, uno de los países más violentos del planeta. Sin embargo, no se habían aplicado campañas de tal magnitud. El actual mandatario se está mostrando implacable, incluso, contra cualquier individuo que favorezca a las mafias (https://bit.ly/391p6fe).

Firmeza (Decisiveness): su discurso contra los pandilleros es contundente. Si los que están libres matan, los que están encarcelados sufrirán las consecuencias (https://bit.ly/3FkNqEV).

Tacto (Tact): consciente de probables errores en algunas detenciones, lo expone públicamente como muestra de empatía con las familias damnificadas, pero, eso sí, con un mensaje tajante y seguro (https://bit.ly/3kJEfV7).

Integridad (Integrity): aunque en ocasiones emplea un discurso imperativo, los agradecimientos, las disculpas y la autoexigencia también afloran en sus publicaciones (https://bit.ly/3wfpZZD).

Entusiasmo (Enthusiasm): cree en su proyecto de país y, en particular, en su campaña contra las pandillas. Publica a diario acerca de la reducción de la violencia en el país, el incremento de la seguridad, las cifras de pandilleros encarcelados… (https://bit.ly/3LVKOQk).

Comportamiento (Bearing): el 26 de marzo de 2022 fue el día con mayor número de homicidios registrados en El Salvador en lo que va de siglo. Al día siguiente, Bukele expuso su respaldo a las fuerzas policiales salvadoreñas y advirtió a los jueces con comportamientos deshonestos (https://bit.ly/3w99Rsl).

Altruismo (Unselfishness): exhibe su íntegro compromiso y dedicación por la seguridad y el bienestar de los ciudadanos de su país (https://bit.ly/3ypVToK).

Valor (Courage): es consciente de que su campaña actual está en el punto de mira de variados organismos internacionales. Aún así, persevera en su causa (https://bit.ly/3wbNJ0x).

Conocimiento (Knowledge): se presenta como experto en la guerra contra las pandillas. A menudo enumera casos de algunos pandilleros concretos: condenas, juicios, cargos, lugar que ocupan dentro de las bandas… (https://bit.ly/3MTgzJG).

Lealtad (Loyalty): las fuerzas policiales realizan la función más relevante en la lucha contra las bandas juveniles. Asimismo, sus acciones son susceptibles de ponerse en entredicho, sobre todo, por todos aquellos que se oponen a dicho proceso. En este punto, el apoyo y la defensa de Bukele a los cuerpos de seguridad es absoluto (https://bit.ly/3LZgHHA).

Resiliencia (Endurance): cada publicación acerca de los terroristas detenidos, el dirigente la termina con la misma coletilla: “seguimos”. Con ello, manifiesta su tenacidad en la lucha contra la inseguridad en El Salvador (https://bit.ly/3wcGOUL).

Algunos respaldarán la labor de Nayib Bukele como presidente. Otros, no. Si bien, sus rasgos como líder son incuestionables. Del análisis de sus publicaciones en Twitter se han podido extraer, uno a uno, todos los atributos instaurados por los Marines de EEUU. Su modo de comunicar (claro, conciso y contundente) define su figura como dirigente. Para concluir, aunque este artículo se ha focalizado en la campaña contra las pandillas, el presidente salvadoreño exhibió su liderazgo desde el inicio de su mandato. Su primer discurso en la ONU es un evidente ejemplo de ello (https://bit.ly/3ytvPJD).

 

Aitor Treserras es asesor de comunicación (@aitortresserras)