Elecciones en Pakistán: el proceso electoral de 60h que cambió un país

GUILLEM PURSALS

Después del cese por parte de las autoridades judiciales y políticas del primer ministro de Pakistán Nawaz Sharif por escándalos de corrupción, empezó la reclamación de elecciones al primer ministro interino. El 25 de julio era la fecha indicada. Se preveía que serían unas elecciones largas, complicadas y con tensiones por el contexto en el cual habían sido convocadas, pero no fue así. Lo que fue largo, complicado y con tensiones fue el escrutinio, más que toda la jornada electoral.

El sistema electoral pakistaní es una calca del sistema británico, un sistema mayoritario con distritos uninominales. Quien saca más votos, consigue el escaño. Esto tiene como consecuencia que los distritos o circunscripciones electorales no tengan realmente nombre, sino que su nombre oficial sea el escaño, de los 342 que hay, que les corresponde en la Asamblea Nacional. Por ejemplo NA-58, que es un uno de los distritos de Rawalpindi a la Asamblea Nacional. Eso sí, a diferencia del sistema británico, cuesta mucho saber quién ha ganado en una ciudad grande hasta que no se tiene el resultado final, pues Faisalabad tiene diez distritos, Lahore tiene catorce, Karachi tiene quince o Islamabad tiene tres escaños. Esto provoca que se tenga que ir con la lista de los distritos y donde corresponde cada uno para informase de cómo queda electoralmente una provincia, pues la comisión electoral informa de la misma manera. Por ejemplo para informar de la circunscripción novena de Lahore, distrito del futuro primer ministro Imran Khan, se informó de la siguiente manera: NA-131: PTI 84.313 – PML (N) 83.633. 

Durante la jornada electoral se vivieron momentos de tensión por el atentado en Quetta contra un convoy policial y militar que vigilaba el puesto electoral situado en una escuela cercana, donde había un punto de votación. Y Aunque la prensa occidental señaló que el objetivo era el punto de votación, las autoridades militares y policiales rápidamente informaron que el objetivo eran los efectivos policiales y militares.  A pesar de que el atentado provocó una treintena de muertos, el punto de votación se reabrió cuando las autoridades electorales declararon que se había vuelto a la normalidad, dejando de derivar a la gente a otros puntos de votación. En otros puntos del país, como por ejemplo en los de la región tribal o FATA, Áreas Tribales Administradas Federalmente, en el distrito de Khyber Pakhtunkhwa, las mujeres acudían por primera vez en la historia a votar, como por ejemplo en Dir. Además de haber dos candidatas transgénero, Nayab Ali (NA-142) y Nadeem Kashish (NA-52), ambas candidatas por el PTI.

También hubo momentos extraños, cuando un hombre con burka irrumpió en el centro de votación femenino del municipio de Karak. En este punto es importante explicar que en Pakistán existen puntos de votación masculinos, puntos de votación femeninos y puntos de votación mixtos. Esto a la hora de repartir los escaños es importante porque las mujeres y las minorías religiosas tienen reservados escaños de la Asamblea Nacional, que son elegidos de forma indirecta por estos centros de votación para mujeres. En la circunscripción NA-108, correspondiente a una de las que corresponde a Faisalabad, un gran grupo de mujeres fueron a votar a la vez en el punto de votación que les correspondía bloqueando las calles alrededor de éste, tal como informó la Comisión Electoral de Pakistán. Muchas mujeres a través de las redes sociales hicieron una campaña muy activa, no solamente pidiendo el voto, sino también pidiendo que se fuera a votar masivamente.

Otro momento peculiar fue la notificación de la Comisión Electoral de Pakistán (CEP) al candidato Imran Khan, anunciándole que tomaría medidas porque al votar en la circunscripción NA-53, enseñó su voto y mostró a las cámaras qué votaba. Esto según CEP está sancionado con declarar el voto nulo porque existe el derecho del secreto de papeleta, así que puedes decir a quien votas, incluso llevar chapas u otros objetos de campaña, pero no puedes enseñar la papeleta de votación. Mientras, el hijo de la antigua Primera Ministra de Pakistán Benazhir Bhutto y candidato por el PPP, Bilawal Bhutto, hizo un tweet enseñando el dedo manchado de tinta, conforme había votado, con el hashtag #DemocracyistheBestRevenge, siguiendo el ideario de su madre que la mejor forma de luchar contra el terrorismo es a través de la democracia.

El uso masivo de las redes sociales, sobretodo Twitter, fue fundamental para hacer campaña y también para animar a votar. Jóvenes sobretodo hicieron uso de la red social mostrando su dedo manchado de tinta, como también para reclamar atención de la CEP en los puntos de votación. Un claro ejemplo de ello fue la solicitud de una activista paralítica que pidió hacer accesibles a los minusválidos y ancianos las urnas, y la CEP respondió que lo harían, y así  lo hicieron: Pidieron ayuda a la policía, a voluntarios y a miembros de la Comisión Electoral, para que los ancianos o minusválidos pudiesen acceder a las urnas situadas en un primer piso, o simplemente eran inaccesibles sino era a pie. De la misma manera que se habilitaron puntos de votación para mujeres a lo largo de jornada porque en algunos distritos no los había sino eran mixtos, bajando la participación femenina en ellos.

Por último, una vez se cerraron los colegios electorales, empezó el escrutinio. Y mientras pasaba el tiempo, empezaron los rumores. Desde la Liga Musulmana de Pakistán – N se anunciaba que se estaban amañando resultados, desde algunas facciones del Partido Popular de Pakistán se decía que se estaban contando fajos de dinero en lugar de votos, y miembros de Gran Alianza Democrática acusaban a la CEP de poco más que traición. Nadie entendía nada, el escrutinio llegó al 26% y allí estaba, no avanzaba. Casi a las tres de la mañana el portavoz de la CEP, Babar Yaqoob, comunicaba que había un error general del sistema informático que debería poner en orden los votos, debido a que los datos no se estaban introduciendo bien en el sistema. El servidor se colapsó debido que miles de oficiales de las mesas empezaron a utilizar el RTS. A través de Facebook y Twitter se filtraban resultados mesa a mesa, incluso colgando las fotos de las actas oficiales, para que la gente supiese lo que había salido en su distrito, de forma totalmente extraoficial.

48 horas después de empezar el escrutinio, 60 horas después que empezara la jornada electoral del 25 de julio de 2018, Imran Khan, candidato del PTI, salía elegido con 116 escaños y 16,85 millones de votos, ganando las elecciones legislativas, con un 51.7% de participación. Los conservadores de la Liga Musulmana de Pakistán-N conseguían 64 escaños, y el Partido Popular de Pakistán, socialista-centrista, 43 escaños. La facción islámica fundamentalista Muttahida Majlis-e-Amal consiguió 12 escaños, seguida de los partidos provinciales o de las minorías. Los candidatos independientes consiguieron 13 escaños. La victoria de Imran Khan rompe con el monopolio familiar de los Bhutto (PPP) y los Sharif (PML-N), con lo que se considera el fin de una etapa y el principio de otra, pues ha quedado demostrado que se ha producido un cambio en los paradigmas de voto. Aunque la CEP recibió más de 600 informes sobre posibles irregularidades, la comunidad internacional ha reconocido como correctos los resultados. Así pues empieza una nueva era en Pakistán con un nuevo Khan al frente.

 

Guillem Pursals es politólogo y Director de Seguridad. Master en Seguridad. Columnista sobre Israel, Irán, Rusia y China en @RevistaEndavant. Vaticanista y analista de conflictos (@GPursals).