JOSSELINE MUÑOZ
Alguna vez te has detenido a pensar ¿qué es política?, o alguna vez ¿te has encontrado en la situación de que no encuentras la manera de explicar el concepto de política?, o bien, tu profesor de curso lanza la pregunta básica, ¿pero qué es política? Y entonces nos damos cuenta de que a pesar de haber leído a varios autores nos hace falta cuestionar el concepto en sí mismo, para comprenderlo, explicarlo e incluso para desmontar los conceptos predominantes que muchas veces sesgan la mirada de los investigadores.
En este breve artículo, se expone una idea personal sobre Política, y a su vez se liga a otra categoría para encontrar otro cuestionamiento de conceptos. ¿La comunicación política, debe ser comprendida como una actividad que se relaciona con actores institucionalizados o que deberíamos comprender desde una perspectiva abarcadora, en donde esta no solo se manifiesta dentro de una esfera de actividad formal, sino que atraviesa toda relación social por el hecho de partir de una relación de poder entre el que emite el mensaje y quien lo recibe? En ese sentido, este texto trata de hacer inferencias para despolitizar la comunicación política y ubicarla en un plano más cercano a los sujetos sociales de a pie.
Política
La tradición griega de la política considera que esta, está relacionada a la búsqueda del bien común, es decir, el buen gobierno de la sociedad como fin último de la política. Desde esta concepción, la política tiene como intención final la felicidad del hombre, aunque desde una visión más moderna como la maquiavélica esta solo es posible en el ámbito ideal.
De manera más amplia, siguiendo la definición que plantea Canel, (2006)[1], se puede decir que, la política es en principio una actividad que consiste en la toma de decisiones para concretar un fin. En ese sentido, la política es una acción humana que está diluida en varios niveles de la realidad. Por consiguiente, la política responde a la necesidad organizativa de los hombres, en donde precisamente se deben de tomar decisiones. La política entonces, es inherente a toda sociedad y se constituye como el conjunto de fenómenos sociales que se caracterizan por las relaciones de poder, influencia, gobierno y dirección de grupos sociales.
La política solo es útil en tanto que el conflicto está presente en la sociedad, y puesto que este es persistente en todo grupo social, la política procura efectuar aún en las condiciones más superficiales, el consenso social.
Se asume que toda actividad humana dentro de la sociedad, desde la visión aristotélica es política, ya que de manera directa o indirectamente afecta a la comunidad.
Comunicación política
Definir comunicación política pasa por un conflicto teórico e incluso epistemológico, donde se encuentran dos posturas, la primera refiere a la comunicación política destacando el carácter comunicativo de la misma, lo que implica el intercambio de mensajes entre los que participan de este proceso, es decir, la transacción de símbolos, mensajes expresos e implícitos influidos por la cultura, entre los miembros de una comunidad.
La segunda postura dentro del debate académico, señala a la comunicación política desde su carácter político, es decir, su acción política; para este fin, la comunicación política sería aquella que tiene por objeto influir en la política (entendiendo a la política como actividad institucionalizada) de una comunidad y es en ese proceso en el que la comunicación va adoptando su carácter de comunicación política. Se refiere a las influencias políticas que puedan existir entre las instituciones políticas (partidos políticos, Estado, medios de comunicación) y los ciudadanos, con el fin generar un debate público u opinión alrededor de un tema de interés colectivo.
Esta segunda definición, es la que desde nuestra percepción consideramos como limitada, ya que la política no se debe determinar únicamente al ámbito institucionalizado y porque dentro de la comunicación política existen otros actores o protagonistas que no ostentan el poder institucional o aspiran a tenerlo, y no por ellos dejan de comunicarse políticamente; además, restringe la concepción de la intencionalidad de los mensajes: “solo se consideran aquellos que han sido elaborados estratégicamente con el fin de provocar efectos en el receptor” (Canel, 2006:21)[2].
Comunicación política también es, que un docente les pida a sus estudiantes que lo esperen un poco más, de la hora acordada para impartir la clase. Hay otras intenciones dentro del mensaje que no necesariamente fueron premeditadas para incidir en el receptor, pero que, sí reflejan otros elementos como relaciones de poder, acuerdos de intereses, consensos o posiciones antagónicas.
Ahora bien, partiendo de que Aristóteles afirmaba que el hombre es un ser social, pero eminentemente político, el zoon politikón, fundamentada en el hecho de que consideraba al hombre como un animal político, por que tiene logos (razón) y lenguaje. En donde esta última categoría ha facilitado al hombre organizarse políticamente.
Desde esta perspectiva toda comunicación es política, porque se asume en una relación con el otro, sobre la premisa de que toda relación social es una relación de poder. Dicho de otra manera, quien tiene el privilegio de emitir el mensaje lo hace desde una condición de poder (posición privilegiada), indistintamente de qué tipo de mensaje o la intención que este tenga.
Reflexiones finales
La concepción clásica de política en sí misma, en la actualidad dentro de la sociedad avanzada o moderna, no suple la necesidad de explicar los fenómenos que en ella surgen, sin embargo, brinda ciertos referentes y elementos que deben ser entendidos como aportes para la construcción de un concepto que se asocie a la realidad social, evitando sesgos conceptuales e incluso científicos, puesto que política no solo se refiere a una actividad institucionalizada, sino que esta se manifiesta dentro de una cotidianidad social, a partir de las relaciones y decisiones entre los sujetos.
Así mismo sucede con la definición de comunicación política, sin embargo, no es intención de esta breve reflexión, imponer o señalar como la más adecuada la que ya se ha planteado anteriormente, sino, más bien cuestionar los conceptos que muchas veces damos por sentados y que dejan por fuera otras realidades y elementos de fondo dentro del entramado social.
Josseline Muñoz es estudiante de Ciencia Política y Relaciones Internacionales de la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua y investigadora independiente y escritora del blog estudiantil palestra política
Publicado inicialmente en el blog Palestra política
[1] Canel, M. (2006). Comunicacion Política, una Guia para su estudio y práctica. España: Tecnos.
[2] Canel, M. (2006). Comunicacion Política, una Guia para su estudio y práctica. España: Tecnos.
