ELENA POLA
A los medios de comunicación cada vez les cuesta más trabajo captar la atención de los usuarios. Desde hace algunos años asistimos a la incorporación de la lógica del entretenimiento a las noticias políticas y al aumento de contenidos políticos en los programas de entretenimiento (Casero-Ripollés, 2014). De esa fusión surge el concepto de politainment o inforentretenimiento.
El periodismo clásico y de investigación pasa a un segundo plano, se simplifican los mensajes. Encontramos partidarios y detractores de este modelo: lo que para unos puede solucionar el problema de desinterés por la política mediante la humanización de las personas que se dedican a la política, para otros supone una pérdida de calidad del debate político.
Este fenómeno, que se ha potenciado con el uso de las redes sociales, de las que se hacen eco los medios tradicionales, no es nuevo. Ya en 1966 pudimos ver a Manuel Fraga bañándose en una playa de Almería para mejorar su imagen y calmar los ánimos por el incidente nuclear que había tenido lugar en la zona.
Veamos ejemplos actuales de nuestros políticos para entender mejor el fenómeno.
Dice Santiago Castelo que se reivindica la primera persona, el testimonio pronunciado por el protagonista como garante de credibilidad. Así debió entenderlo el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, al compartir este vídeo en sus redes sociales tras conocer su positivo por COVID-19.
Este vídeo ha tenido más de cien mil visualizaciones, generó más de 6000 reacciones y más de 3000 comentarios. Un vídeo autograbado, en su casa, la imagen oscilante y el sonido que se acopla refuerzan su imagen de autenticidad.
Las imágenes de backstage también son un elemento que permite conocer facetas que los medios tradicionales no muestran. En este grupo encontramos reuniones de trabajo, momentos previos a ruedas de prensa, estudiando durante los desplazamientos, ultimando detalles con el equipo. Esa mirada un poco cotilla a lo que se cuece antes de que se produzca la intervención oficial busca la complicidad con la audiencia.
Las imágenes con la familia o con las mascotas también son un recurso habitual de este género. Permiten que los seguidores se identifiquen con esa faceta de los políticos, y esos valores o percepciones comunes, logran crear un vínculo emocional que puede ser clave para movilizar votantes en unas elecciones. Porque puede que no me interese la política o la línea de gobierno, pero sí que me siento representado por esa faceta de familia con hijos pequeños, el cuidado de las personas mayores o el cariño por los animales.
Un recurso también frecuente es utilizar los gustos, aficiones e intereses para mostrar una perspectiva más completa del personaje público y porque puede ser otra vía para lograr el engagement con algún sector del electorado que se nos resiste. Los más habituales son la cocina, la práctica de deportes o las actividades culturales.
El vicepresidente de la Junta de Andalucía, Juan Marín, se atrevía con unas torrijas durante el confinamiento.
¿Cuáles son las peculiaridades del politainment en Andalucía? Acabamos de ver algunos ejemplos de nuestros políticos, pero esas imágenes podemos encontrarlas en los perfiles de las redes sociales de otros políticos en activo a nivel nacional e internacional. Andalucía cuenta con multitud de eventos a lo largo del año que permiten esa imagen desenfadada, cercana y movilizadora de emociones que comentábamos como rasgo principal del inforentretenimiento.
La Semana Santa es un atractivo turístico y cultural en muchos lugares de España, pero el sentimiento con el que se vive aquí, el ambiente de las procesiones, las hermandades, el color y la música, crean esa atmósfera en la que nuestros políticos pueden manifestar su fervor y admiración, es un momento íntimo y familiar, que nos permite ver más de lo que suelen mostrar. Y de paso, colocan sus mensajes.
También ha sido un foco de interés mediático año tras año la presencia de nuestros representantes en la Feria de Abril de Sevilla.
La Feria de Abril tiene un protocolo que debe ser tenido en cuenta para no convertirse en noticia. Le sucedió a la Presidenta del Parlamento andaluz, Marta Bosquet, que quiso innovar con este traje en la edición de 2019 y se convirtió en el centro de la polémica por no vestir el tradicional traje de flamenca.
Tanto interés mediático genera, que suele atraer a personalidades de la política nacional, para hacerse un hueco en la agenda durante los días de su celebración.
Otro clásico es la Romería del Rocío (Huelva), nueva oportunidad rodeada de fervor religioso, para lanzar mensajes políticos. Aquí os comparto uno de Francisco Serrano (VOX), que aprovecha el marco de la ermita para activar los marcos mentales y colocar su slogan.
Pero si hay una muestra de politainment andaluz reconocible por todos es la de las chirigotas de los Carnavales de Cádiz. La sátira, la crítica y el hartazgo contra los políticos se manifiestan entre carcajadas con esta tradición, de la que se hacen eco todos los medios. Solo de esta forma se puede hablar tan claro sin herir ninguna sensibilidad.
La pandemia ha suspendido nuestras manifestaciones tradicionales de inforentretenimiento y nuestros políticos han comenzado a explorar nuevas vías, como os mostraba al comienzo de este post. Pienso que en términos de comunicación, ha sido positivo, porque se ha proyectado una imagen renovada de nuestros representantes, se han introducido nuevas técnicas de comunicación y marketing y ha enriquecido su imagen en redes sociales.
Termino este post con una intervención de Juanma Moreno en el programa de Bertín Osborne en Canal Sur, la televisión autonómica. Fue criticado por aprovechar este programa para lanzar su mensaje y se acusó al conductor y al invitado de ser muy condescendientes con él. Lo cierto es que mostró sentido del humor, participó en directo desde su casa con un estilo sencillo y directo, y su popularidad según las encuestas sigue creciendo.
¿Qué opináis? ¿Nos interesa más la política si se mezcla con el entretenimiento o se banaliza demasiado? ¿Tenéis mejor opinión de nuestros políticos cuando los veis en escenas cotidianas alejados de la actividad institucional protocolaria?
Elena Pola es politóloga. Funcionaria de la Junta de Andalucía y consultora especialista en comunicación institucional (@elena_pola)
Publicado anteriormente en el blog de Elena Pola
