JOSÉ IGNACIO AVELLO ORTIZ
Las instituciones armadas chilenas durante muchos años han prestado servicio de mantenimiento de la seguridad en el país con una mirada desde el territorio soberano. La historia les ha entregado grandes responsabilidades, pero desde hace unos meses su profesionalismo, entrega y dedicación a la labor militar se ha encerrado solo en situaciones donde la corrupción y la mala utilización de recursos por parte de algunos funcionarios han dejado a las instituciones armadas en uno de sus peores momentos después del retorno a la democracia.
En este contexto me refiero a una serie de hechos que han afectado la imagen y el verdadero rol de las Fuerzas Armadas (FFAA) durante el año 2018, casos de denuncias graves sobre mala administración de fondos del Estado, mal uso de viáticos de altos mandos de las instituciones armadas (ejército) y que ha costado el llamado a retiro a varios generales de las instituciones armadas.
Sí podemos definir culpas, pero no generalizar: existen responsabilidades individuales y sobre todo de mando, dado que son ellos los encargados de informar, apreciar, ordenar y lo más importante fiscalizar.
Desde una mirada progresista y con la idea de que algunos sectores comiencen a plantear ideas y entrar de lleno en las decisiones o construcción de nuevas políticas de administración de la defensa nacional, debemos construir un relato donde seamos capaces de debatir sobre seguridad, defensa y muchos otros temas para retomarlos con fuerza y dedicación.
Se deben construir equipos de trabajo que potencien la relación cívico-militar, pero sobre todo una de las cosas más importantes es el reordenamiento de los recursos que llegan a estas instituciones. Chile ya no está para tolerar este tipo de acciones que sólo enlodan la imagen de un ministerio tan importante del poder Ejecutivo como es el de Defensa, Fuerzas Armadas preparadas y formadas con recursos de todos los chilenos.
Debemos generar unidades especialistas con el personal capacitado para el mejor control de los recursos, para que sean capaces de exigir las auditorías temporales y llevar al día cómo se está invirtiendo en estas materias, así como también las responsabilidad administrativas de quienes caen en ilícitos y no solo que se busque bajo el Código de justicia militar una sanción.
Aquí se debe realizar un cambio de fondo en la reglamentación de quienes administran la parte jurídica en las FFAA, además, deben ser gente preparada y con el perfil profesional a la altura del cargo, a eso llamaremos modernización.
Es justo también poder dejar claro que en esta crisis interna de las FFAA existe una responsabilidad directa del Ejecutivo, que por mucho tiempo delegó y entregó facultades para que las instituciones tomarán decisiones prácticamente solas y sin mayor entrega de información hacia los gobernantes, es algo que debemos asumir desde el punto de vista político, del control y de gestión.
¿Hasta cuándo seguiremos con esta crisis? ¿Es sólo el comienzo? ¿Habrá más sorpresas? Creo que lamentablemente esto continuará, aparecen todos los días situaciones preocupantes, abusos de poder, descontrol en las finanzas y sobre todo el maltrato hacia quienes denuncian malas prácticas en las instituciones.
¿Cómo protegemos a quienes han denunciado estos temas? Es una situación compleja, porque quien denuncia es sancionado: debemos ir pensando en construir o constituir, por ejemplo, una unidad especializada con la participación de civiles en la que se pueda brindar protección al denunciante.
De esta manera es como Chile puede avanzar hacia la construcción de propuestas y a la modernización de las FFAA. Los partidos, en el área programática, debemos trabajar muy unidos con un solo objetivo: sacar adelante algo tan significativo e importante como las instituciones de la defensa nacional.
José Ignacio Avello Ortiz es Magíster en Cs. Políticas y comunicaciones. Secretario General ONG-MST y licenciado en Cs. militares, Op. y logística. Diplomados en Formulación y evaluación de Proyectos, Gestión Org. de la empresa y Política y sociedad de la información (@j_ignacioavello)
