Españoles:
Ha llegado la hora de pelear y de concluir, de una vez para siempre, con los que os vienen oprimiendo. La dignidad de la patria lo exige, el triunfo de la libertad lo reclama.
«La inmoralidad en las altas esferas sostenida por la adulación oficial y por el despotismo oficinesco han hecho indispensable un cambio radical en los destinos de nuestra patria. No hay nada mas temible ni perjudicial que los motines.
No hay nada más grande ni más justo que las revoluciones cuando lo exige la miseria del pueblo y el sufrimiento del ejército, cuando la opresión ha tocado los límites de la tiranía y el desconcierto ha llegado a convertirse en sistema.
«Padece la agricultura, sufre el comercio, agoniza la industria, está muda la prensa y la tribuna se cubre de rubor al contemplar su patria …. La revolución es el único medio a nuestros males. Ella convocará Cortes constituyentes por medio del sufragio universal…
«La abolición de la odiosa ley de consumos, el respeto a todos los derechos legítimamente creados y la destrucción de todo lo que se ha hecho a la sombra de la intriga, han de ser los medios de desembarazar el camino…
«La libre emisión del pensamiento y el derecho de reunión y asociación como medios de dar a conocer las ideas, el sufragio libre para unificarlas y la libertad de tribuna como medio de convertirlas en leyes, haciendo que los gobiernos sean producto
de la opinión pública, serán el coronamiento de nuestra obra cuando haya pasado el periodo revolucionario.
“¡A las armas, pues, compatriotas! Un pequeño esfuerzo de parte de cada uno y habrá concluido el caciquismo de los pueblos, las camarillas de las capitales y la tiranía de Madrid.
“¡A las armas, con completa confianza en el éxito, que no dura la vida de los malos gobiernos más de lo que quiere permitir el, sufrimiento agotado de los pueblos!
“¡Viva la libertad!, !Viva la soberanía nacional!