Turismo Político en Nueva York

MARINA ISUN

La ciudad que nunca duerme, la gran manzana, la capital del mundo, la ciudad de los rascacielos, Gotham o Empire State… Nueva York es conocida con muchos nombres y apodos que dan forma a su versatilidad como ciudad. Aquí os voy a proponer dos miradas más sobre esta maravillosa ciudad en un marco de turismo político.

Este pasado 2017 ha sido un año convulso a nivel político y social en Estados Unidos. Ha sido el primer año de mandato de Donald Trump y sus políticas, lo que ha significado también un año de polémicas y conflictos. Probablemente, dos de las mayores controversias se han generado alrededor de la inmigración y de los derechos de la mujer, lo que ha llevado a la movilización, organización y protesta, por parte de la ciudadanía, por la defensa de sus causas y derechos.  Nueva York no ha sido menos. Conocida como la gran ciudad y feudo demócrata, NYC ha estado en el centro de muchas de estas protestas y movilizaciones, así como en la vertebración de la defensa de estas causas. Así que os propongo dos nuevos apodos, miradas y guías: La Nueva York feminista y la Nueva York Inmigrante.

 

La Nueva York feminista

Cultura:

¿Quieres leer y saber más sobre el feminismo? Te propongo las siguientes librerías donde encontrarás desde grupos de lectura y debate, a otro tipo de creatividades feministas como postales, pósters o pegatinas. En el 828 de Broadway encontrarás la  Strand Book Store, una librería preciosa de libros de segunda mano, así como todo tipo de artículos reivindicativos. Si lo que os va es la literatura y el debate social, vuestro sitio es el Bluestocking. Allí encontrarás estanterías llenas de bibliografía sobre feminismo, democracia, racismo, desigualdad, etc. Es habitual encontrar gente debatiendo, así como actividades programadas, tipo proyecciones de documentales y películas, debates, encuentros literarios… todo acompañado por una cafetería de comida orgánica y con productos de comercio justo.

Otro espacio que reúne libros y activismo sería el Troll Hole NYC de Brooklyn. Troll Hole se define como un pequeño negocio feminista, queer y prointerseccional ubicado en Bushwick. Su objetivo es fomentar un espacio feminista queer con respeto y compromiso con la comunidad.

Si lo tuyo es más el arte, tienes que pasarte por el Centro Elizabet A. Sackler para el arte feminista. Ubicado en el cuarto piso del Museo de Brooklyn, este centro expositivo y espacio educativo ha sido una plataforma para dar apoyo a mujeres artistas y trabajos feministas. No podríamos hablar de arte, feminismo y NYC sin nombrar el New York Feminist Art Institute (NYFAI). Cerrado en los noventa, el NYFAI fue un centro fundado por mujeres artistas, educadoras y profesionales que ofrecía talleres, clases, exposiciones y publicaciones que contribuyeron a la agenda política y cultural del movimiento feminista de ese momento.

  

Activismo:

Las marchas por los derechos de la mujer y los derechos humanos han sido uno de los acontecimientos del último año. El pasado 20 de enero, coincidiendo con la celebración del primer año del gobierno Trump, tuvo lugar la primera  Women’s March del año. La manifestación salía de Central Park y bajaba hacia el sur por la sexta avenida hasta llegar a Columbus Circle, pasando muy cerca de una blindada Torre Trump. Estas marchas también han dado lugar a la creatividad artística y al resurgimiento de nuevos símbolos feministas, como el popular gorro rosa (pussy hat),  bajo el paraguas del #ARTivismo. En este ambiente de protestas y movilizaciones ha proliferado el desarrollo de numerosas creatividades, mensajes y performance por parte del imaginario colectivo. Creaciones que influirán en la comunicación política e institucional.

Otro rincón de Nueva York que ha resurgido como símbolo feminista ha sido la niña de Wall Street. Una figura de una niña, en actitud desafiante, apareció en vísperas del 8 de marzo enfrente del famoso toro de Wall Street como parte de una campaña para denunciar la brecha salarial y la poca presencia de mujeres en la dirección de las empresas. Obra de la artista Kristen Visbal, esta niña ha pasado a ser un símbolo del feminismo y de la lucha por la igualdad salarial en Nueva York y en todo el mundo.

Algunas de las organizaciones y entidades que luchan y trabajan por los derechos de las mujeres se encuentran en Nueva York. Una de las más conocidas sería la National Organization for Woman (NOW-NYC). Situada en el barrio de Chelsea, tiene por objetivo defender los derechos reproductivos, crear igualdad económica, promover la representación política de las mujeres y poner fin a la discriminación y violencia contra las mujeres. Otra conocida entidad sería la International Planned Parenthood Federation, una organización que tiene como objetivos generales la promoción de la salud reproductiva y sexual, así como la defensa la planificación familiar y el uso de métodos anticonceptivos.

En la 220 Este con la calle 42 encontrarás la entidad de la ONU que trabaja por los derechos y el empoderamiento de la mujer, conocida como ONU Mujeres (UN Woman).

 

Ocio

El feminismo se ha convertido en algo más que un movimiento social o doctrina. Se ha convertido también en una tendencia y un modo de vida. Si buscas camisetas o bolsos con mensaje, libretas con iconos del feminismo o las últimas chapas e insignias con futuras candidatas a la presidencia, no puedes olvidarte de pasar por la Bulletin Store. La encontrarás en el barrio de Williamsburg (Brooklyn) y en el 27 de Prince Street en el SoHo (Manhattan). En la misma zona del SoHo encontrarás también otras tiendas del mismo estilo, como el pop-up store Otem x The Outrage o OtherWild.

Si buscas lugares donde relajarte, tomar algo o hablar, pásate por el  Bar Moga. Este espacio de fusiones asiáticas ha recuperado el concepto Moga (mujeres modernas), en alusión a las mujeres rebeldes y reivindicativas de los años veinte en Japón. Aquí encontrarás cócteles hechos por y para mujeres rebeldes. Otro rincón que reivindica y se inspira en la cultura feminista de principios del siglo XX es The Wing, el club feminista de referencia en Nueva York. Allí encontrarás un espacio de coworking, biblioteca, cafetería, sala de lactancia, encuentros culturales y actividades varias que giran entorno al feminismo. Por el módico precio de 215 dólares mensuales puedes formar parte del meeting point feminista de Manhattan.

 

La Nueva York inmigrante

Historia y demografía:

La historia y el origen de la ciudad de Nueva York no se pueden entender sin la inmigración. El primero que llegó a la isla de Manhattan, habitada por los indios, fue Giovanni da Verrazzano, al servicio de la corona francesa, en 1524.

El siguiente en llegar a la bahía fue el inglés Hudson, al servicio de los Países Bajos, quien dio su nombre al río que baña Nueva York. Los primeros en instalarse fueron los holandeses, quienes en 1614 construyeron Fort Nassau. Doce años más tarde, los holandeses compraban la isla de Manhattan por 24 dólares a los indios, y creaban la colonia Nueva Ámsterdam.

En 1674, la isla pasó de los holandeses a los ingleses por el tratado de Westminster. La isla fue rebautizada con el nombre de Nueva York, en honor al Duque de York, y junto a las poblaciones vecinas, los ingleses crearon la colonia de Nueva Inglaterra. En esta nueva etapa, Nueva York prosperó como puerto comercial y fue ganando relevancia, convirtiéndose en 1835 en la ciudad más grande de Estados Unidos, gracias a la inmigración y el desarrollo. Durante el pasado siglo, Nueva York no ha dejado de crecer, convirtiéndose en el polo de la inmigración asiática, europea y de América Latina y llegando a los 8,5 millones de habitantes en 2016.

Actualmente Nueva York se organiza en cinco distritos: Manhattan, Brooklyn, Queens, Bronx y Staten Island. Estos distritos agrupan diversos barrios que se han convertido en núcleos culturales y focos de inmigración. Las primeras olas de inmigrantes se instalaron en el Lower Manhattan. En la actual Little Italy se asentaron los italianos; en el Lower East Side se encontraban los irlandeses, afroamericanos y judíos; el East Village acogía a los alemanes y finalmente la comunidad china se situaba en el actual Chinatown. Las fábricas y almacenes, principales lugares de trabajo, se situaron en el actual SoHo y en Tribeca.

La siguiente ola de inmigrantes, entre mediados del siglo XX y los setenta, trajo a Estados Unidos a europeos, africanos, asiáticos, los cuales se sumaron a los inmigrantes de Oriente Medio y a los hispanos. La mayoría continuaron en las zonas del Lower Manhattan, pero poco a poco esta tendencia fue mudando, creando así nuevas comunidades. Los judíos, italianos y alemanes dejaron sus espacios a los nuevos inmigrantes hispanos y chinos. Éstos se trasladaron al Bronx (irlandeses, italianos y afroamericanos), Brooklyn (judíos, asiáticos y afroamericanos) o Queens (europeos y asiáticos).

Actualmente, se calcula que el 36% de la población de Nueva York, documentados e indocumentados, es inmigrante. De la población extranjera, 380.000 son dominicanos, 350.200 son chinos y 186.300 son mexicanos. Los siguen de cerca los jamaicanos y los guyaneses. Las siguientes cinco nacionalidades serían Ecuador, Haití, Trinidad y Tobago, India y Rusia.

En el área metropolitana se encuentra la mayor comunidad judía fuera de Israel, de hecho, hay más población judía en Nueva York que en Tel Aviv. En el barrio de Williamsburg, Brooklyn, se encuentra una de las comunidades de judíos ultra ortodoxos más influyentes que vive en su microcosmos.

Las mayores comunidades hispanas que se encuentran en los distintos distritos de la ciudad serían: Manhattan (Loisaida, mayoritariamente puertorriqueños al igual que El Barrio, donde también se encuentran muchos mexicanos, Washington Heights, donde encontramos una gran comunidad de dominicanos seguidos por ecuatorianos y mexicanos), en Queens encontraríamos el barrio de Jackson Heights, donde la población latina en su mayoría es colombiana y peruana, y el barrio Corona donde hay una variada comunidad hispana de distintos países como República Dominicana, México, Colombia, Ecuador, Guatemala, Bolivia, Perú y Chile.

En el Bronx, encontraríamos el caribeño West Bronx, con residentes puertorriqueños y dominicanos, y el Sur del Bronx con también dominicanos y hondureños. Este último sería una de las zonas más conflictivas de la ciudad. Por lo que hace a Brooklyn, encontraríamos el barrio latino por excelencia, Sunset Park, muy popular en los noventa y conocido como la Pequeña América Latina de Brooklyn, así como el East New York, y finalmente la zona de Bushwick, una antigua zona pobre que a la vez alberga una de las mayores colecciones de street art, grafiti y murales de la ciudad, haciéndolo un nuevo barrio de moda.

 

Cultura:

Entre 1892 y 1954, Ellis Island fue la puerta de entrada a Estados Unidos. Se calcula que llegaron 12 millones de inmigrantes a través de ese acceso. Actualmente se dice que más de 100 millones de americanos son descendientes de esa inmigración. En la isla de Ellis se realizaban todos los controles y trámites. Actualmente, se encuentra el Museo de la Inmigración instaurado en la isla desde los noventa. El museo se encuentra cerca de la mundialmente conocida Estatua de la Libertad, un regalo de Francia por los 100 años de la Declaración de Independencia de los Estados Unidos.

Volviendo a la isla de Manhattan, en el Battery Park (Downtown) se encuentra la escultura The Inmigrants, dedicada a todos los inmigrantes que llegaron por esa bahía. El monumento, obra del escultor español Luis A. Sanguino, se encuentra al lado del Castle Clinton, el cual, durante años y hasta la apertura de la isla de Ellis, fue centro de inmigración.

Otro gran museo sobre la inmigración sería el Tenement Museum, situado en Orchard street en el Lower East Side de Manhattan, destino de los primeros inmigrantes. Este es un museo histórico en el que conocerás cómo vivían los primeros inmigrantes en Nueva York. 

Sobre los orígenes de los Estados Unidos y de la ciudad de Nueva York puedes visitar el Museo Nacional de los Indios Nativos Americanos, situado muy cerca del Battery Park. También podrás profundizar sobre la ciudad de Nueva York en la Sociedad Histórica de Nueva York o en el Museo de la Ciudad de Nueva York.

Si estás interesado en los procesos migratorios y todo lo que rodea algunas culturas y religiones concretas, te recomiendo los siguientes espacios. Si quiere conocer un lugar fuertemente relacionado con la inmigración irlandesa, no deje de visitar la preciosa Saint Patrick’s Cathedral, situada en la Quinta avenida con la 50. Si prefiere conocer más sobre la cultura asiática, puede visitar el Asia Society and Museum o el Museum of Chinese in the Americas (MOCA). En Little Italy, en el SoHo, encontrarás los rincones que recuerdan la América italiana, con sus restaurantes de pizza y pasta y bufandas de los principales equipos italianos de futbol.

Descubrir la Nueva York judía es una obligación, si quiere conocer profundamente la ciudad, y es que esta ciudad sin su herencia hebrea, no sería lo mismo. La primera parada será en el Jewish Museum, el museo se define como la intersección entre la cultura judía y el arte. También está el Museo de la Herencia Judía, creado para rendir homenaje a las víctimas del Holocausto. Parte importante de la colección recorre la historia del pueblo judío que inmigró, mayormente de Europa central y del Este, a Nueva York. Otro punto de visita interesante sería el Museo de Eldridge Street, ubicado en una sinagoga de 1887 homónima. Y sin duda, callejear por el barrio de Williamsburg.

En el 290 de Broadway encontrará el African Burial Ground, un espacio que honra la memoria de los esclavos africanos que ayudaron a construir Nueva Ámsterdam. Un rincón para recordar y visibilizar la esclavitud en la historia de la ciudad de Nueva York. Otro lugar para conocer más de cerca la cultura afroamericana sería el barrio de Harlem. Allí encontrarás los mejores rincones de jazz y blues, así como la mejor Soul Food o las emblemáticas misas de góspel como la de la Abyssinian Baptist Church.

Finalmente, sobre la inmigración hispana puede encontrar distintos espacios de interés, como centros culturales o casas regionales de los distintos países. Podría destacar el Hispanic Society of America, un museo y biblioteca que recoge y expone la cultura, arte y literatura hispánica. Sobre arte hispano también va el museo El Barrio, en la milla de los museos, en concreto sobre arte latinoamericano y caribeño, con especial presencia de obras de Puerto Rico.

 

Activismo:

Combatir la inmigración ha sido uno de los mantras de la administración Trump. Las redadas de inmigrantes en Estados Unidos se han incrementado en últimos meses, no solo en hogares, sino también en lugares de trabajo. Procesos que en ocasiones han sido sin garantías legales, redadas aleatorias o discriminación racial o religiosa, han sido hechos que han caracterizado este pasado año. Y en Nueva York no ha sido menos. Pero este clima tan negativo y de desprecio hacia los inmigrantes también ha generado acciones positivas. Por una parte, la sociedad, más organizada y crítica que nunca, ha plantado cara a dichas políticas y desplantes en numerosas movilizaciones en la ciudad. La administración local de Nueva York también ha avisado que no piensa seguir las órdenes del presidente y que protegerá a los inmigrantes y a los conocidos dreamers, esos jóvenes y niños que entraron a Estados Unidos de manera irregular acompañando a sus padres y que, sin saber su condición migratoria, han crecido y vivido en el país que consideran su hogar.

Algunas organizaciones que trabajan para proteger los derechos de los inmigrantes serían The New York Immigration Coalition, la cual lucha para los derechos de los inmigrantes. Defienden que todas las personas son bienvenidas, merecen un trato justo y una oportunidad. Otra organización sería el Center for Battered Women’s Legal Services at Sanctuary for Families, la cual ofrece servicios legales para mujeres víctimas de violencia. El centro proporciona representación legal para estas mujeres en la corte familiar, en la corte criminal, en casos de derechos civiles y en la corte de inmigración. También la Immigration Advocates Network ofrece servicios de asesoramiento legal para inmigrantes, así como la RIF Ayslum, la cual se centra en ofrecer servicios legales y sociales a solicitantes de asilo para recuperarse y reconstruir sus vidas.

Finalmente, si hay un sitio donde reina la multiculturalidad y es parada obligatoria para cualquier amante de la política, ese es la ONU. En Nueva York encontramos su sede central, la cual se puede acceder sin problema, previa reserva con antelación y pago. Encontrarás visitas guiadas en distintos idiomas, también en español, y te ofrecerán la oportunidad de conocer una de las grandes organizaciones políticas y sus entresijos.

 

Ocio:

La multiculturalidad de la ciudad Nueva York y las influencias de las distintas religiones y costumbres de los países de origen de las personas inmigradas han hecho de esta ciudad una perecea de la gastronomía y las celebraciones.

La agenda de celebraciones de Nueva York es el espejo de la diversidad de la ciudad.  Empezamos el año con el Nuevo Año Chino, seguimos con la celebración de San Patricio, el 17 de marzo, por parte la comunidad irlandesa. Continuamos con la celebración de la Pascua por parte de los católicos. Quien quiera celebrar el mexicano 5 de mayo, puede acercarse al Sunset Park, donde encontrará actividades, conciertos y el desfile para festejar esta fecha.

En septiembre tiene lugar el Festival de San Gennaro en Little Italy, una festividad inspirada en la ciudad de Nápoles y que conmemora al santo martirizado San Gennaro di Napoli. Para el 12 de octubre se celebra el Columbus Day, una celebración en honor a Cristóbal Colón y su llegada a América. Finalmente, tenemos la fiesta de Halloween el 31 de octubre, una fiesta importada por los inmigrantes irlandeses a mediados del siglo XIX que se hizo popular en los años 20 por su comercialización.

Los inmigrantes italianos y los judíos hicieron famosa a la ciudad por sus bagels, sus cheesecakes y por la pizza al estilo neoyorquino o los espaguetis con albóndigas. Los carritos de comida en plena calle son otra característica de la gastronomía local. Esta costumbre hizo de la comida oriental, como los faláfels y los kebabs, o los tacos mexicanos, un importante elemento en la dieta de la ciudad, aunque los hot dogs y los pretzels son todavía los principales alimentos que se venden de esta manera.

Para recomendar un par de sitios interesantes ligados a la inmigración, empezaría por el restaurante La Nacional. En este restaurante español podrás degustar unas tapas con una caña mientras sigues el futbol, pero lo más atractivo es su pasado. Conocida como la Spanish Benevolent Society, o popularmente como Centro Español o La Nacional, fue un lugar de reunión para los inmigrantes españoles que llegaban en busca de oportunidades. Aquí se les ofrecía alojamiento, comida y atención medica. Fue el centro neurálgico de la Little Spain y por allí pasaron muchos exiliados de la Guerra Civil, algunos tan ilustres como Buñuel, Picasso, Dalí o García Lorca, el cual escribió Poeta en Nueva York en esos espacios.

Otro rincón histórico sería el McSorley’s Old Ale House, situado en el East Village. Este pub es el bar más antiguo que ha estado en funcionamiento en toda la ciudad. Se abrió a mediados del siglo XIX y era un lugar que reunía a la clase trabajadora irlandesa para compartir una pinta después del trabajo. Fue un bar exclusivamente de hombres hasta 1970.

Finalmente, la última recomendación es  Coup, el primer bar anti Trump. En este bar, el 100% de sus beneficios van directos a organizaciones que están siendo condenadas por la actual administración o necesitan ingresos para seguir trabajando y luchando contra la era Trump. Organizaciones como Planned Parenthood, Human Rights Watch o A.C.L.U., entre otras organizaciones pro derechos humanos, son algunas de las beneficiarias. ¿Pensabas que era imposible el activismo a base de beber vino?

 

Marina Isun es consultora en comunicación y actualmente trabaja para un servicio del Ayuntamiento de Barcelona y para una ONG.@marinaisun

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