El problema económico venezolano

“Mientras no sepamos por qué y para qué la gente necesita lujos 
[vale decir, bienes más allá de los indispensables para la supervivencia] 
no estamos tratando los problemas de la desigualdad ni remotamente en serio”.
Mary Douglas, citada por Zygmunt Bauman en Vida de Consumo.
 
 
… Y como este, la mayoría de nuestros problemas nunca encuentran solución porque no vamos a la raíz, sino que nos quedamos en la punta del iceberg. ¿Qué es realmente lo que está pasando a nivel económico en nuestro país y cómo eso nos afecta a todos como sociedad y como «ciudadanos de a pie»?
Este es el tema que trataremos este jueves 6 de febrero, a las 7:00 pm en El Garito (Calle Sucre, Centro Comercial La Majada), en la segunda edición de nuestro B&P CCS, junto al economista Alexander Guerrero. Economista. Doctor por la University of London. Columnista El Universal, y columnista invitado otros diarios de provincia e internacionales.
Debemos hallar las fuerzas y renovar cada día las energías para continuar en la lucha. ¿Las razones? Muchas: No hay tratamientos médicos para el cáncer ni el VIH; redujeron el presupuesto para las Universidades venezolanas; con el petróleo a $100 el barril, ahora estamos endeudados, PDVSA quebrada, con más de 150 mil personas en nómina, pero produce un millón de barriles menos que en 1999; la moneda devaluada y la escasez a la orden del día. Se robaron más de 20 mil millones de $ mientras hay venezolanos que viven diariamente sin agua, sin luz, ni buenas escuelas, ni servicios de salud. Este gobierno quiere que nos resignemos a las colas, a la escasez, a las migajas, quieren que nos acostumbremos… el gobierno y sus cómplices, que son todos los que se quedan de brazos cruzados. 
 
Como diría Gandhi: «Sé el cambio que quieres ver en el mundo» (o «Tus responsabilidades comienzan y terminan con tu propio comportamiento», que al parecer fue la frase original…). En todo caso, ¡Que hay que ACTUAR, coño! Que debemos hacer algo por nosotros mismos, por nuestra conciencia, por el recate del otro, para poder morir tranquilos, para que la gente que nos importa deje de irse o sufrir aquí, para que nos dejemos de pendejadas y tomemos DECISIONES de las que podamos hacernos cargo hasta el final. 
 
¡Los esperamos! 
Y, de antemano, Gracias por creer. Por luchar. Por ser parte de esto. Por levantar la voz. Por intentarlo.